Fue una cuestión de sensaciones
de eso se trató…
Saber que tuvimos una libertad diferente
donde todo era real y nada virtual
donde inventábamos juegos
disfrutábamos eligiendo piedras
o carozos para la payana,
la rayuela era un desafío
el intercambio de figuritas pura emoción
y las bolitas, una noble competencia.
Fue una cuestión de no dependencia
de dispositivos tecnológicos,
de eso se trató…
Solíamos chapotear en el agua
gozar del aire libre
y perdernos en el pueblo
pero con la única condición
de volver a casa al atardecer
sin minutos que nos condenen
ni peligros que nos acechen.
Fue una cuestión de momentos vividos
De eso se trató.