Sus pétalos se abren recibiendo la sombra: la flor del infortunio, aquélla que sabe de vida y que se entrega a la muerte. Suspiro lento, vital, hundido en sus raíces, raíces fuertes, desgarradoras, rompen el cristal que las alberga.
Ana María Franquesa Strugo
Licenciada en Letras (Pontificia Universidad Católica de Chile). Doctora en
Estudios Americanos (Universidad de Santiago de Chile). Académica y profesora de literatura inglesa en la
carrera de Pedagogía en Inglés de la Universidad de Santiago de Chile.